La de Bea y Manuel fue la última boda del año 2013, fue el broche de oro para una temporada repleta de parejas encantadoras, risas, llantos, nervios y sobre todo mucha emoción y mucha diversión, que al final es lo que buscas para que el día de tu boda sea inolvidable!
Ellos son una pareja que vive en Valencia, aunque la familia de Bea es de por aquí, de La Cabrera. Así que teníamos una boda con gente de aquí y de allá, y con mucha traca de petardo y mucho ruido, que nunca faltan cuando vienen por aquí los de Valencia!.
Este año tuvimos mucha suerte con el tiempo y ese día también fue espectacular: solecito, buen tiempo y una luz preciosa!. la finca y sus flores van cambiando según la temporada, y la verdad es que no podía estar más bonita…
Bea se curró un montón su boda, llenando todo de detalles que encantaron a los invitados, aunque lo que más triunfó sin duda fue el photocall con polaroid! no hacíamos más que cambiar los carretes de la máquina! la verdad es que salieron unas fotos muy chulas, con el espacio suficiente para que los invitados dejaran su dedicatoria a los novios…
De regalo para los invitados trajeron unas botellas de vino personalizadas especialmente para la boda… me encantaron!
Un menú exquisito a cargo de nuestro catering Leal Maese, que nunca fallan… y la carpa decorada en blanco…
Entrada a la carpa con Extremoduro…. no me pudo gustar más!
Bea y iba guspísima, con un vestido de encaje que le quedaba genial, muy sencilla y muy en su rollo. Y el novio también, que siempre nos olvidamos de ellos!
Y dejo para el final al perro (Golfo se llamaba??..). Ellos lo primero que preguntaron es si el perro podía estar en la finca, al final forma parte de la familia… y fue desde luego el más elegante!